No es verdad. que difícil y que terrible es escuchar esa frase cuando a lo que le llaman así representa el noventa y nueve por ciento de las cosas mas maravillosas que te han pasado. Lo cierto es que duele mas darte cuenta que es la verdad, y que el hilo por el cual caminas no es real y que de hecho jamas lo fue. Si algún dia dijiste sentirlo, hoy reconoces que caminabas bajo tu propio camino, que tristemente no es ni la sombra de lo que era tu hermoso mundo imaginario. Pero esta es la realidad, la amarga y hostil realidad de la cual la mayoría de nosotros estamos acobijados. Es muy difícil no romper la estrecha linea que existe entre lo real y lo irreal y aun mas cuando esta ultima te hace mas feliz, pero si te das cuenta es mas bello sentir un abrazo físico, que uno imaginativo. La realidad es de lo que todos nos quejamos, pero que pasaría si algún dia llegáramos a perderle, que pasaría si algún dia la demencia llega a separarnos de esta maravillosa realidad. Nadie sabe lo que se siente no poder sentir un abrazo o un beso real, nadie sabe lo que se siente hablar con alguien y que ese alguien no exista, nadie sabe lo que es escuchar voces que balbucean, hablan, te critican y te incitan a hacer algo que tu no quieres taladreandote el oído día y noche. Nadie sabe que se siente dudar de tu misma existencia y luego hacerte daño para asegúrate de que sigues vivo. Nadie sabe lo que es escuchar la palabra enfermo, loco y tu no sabes porque. Que difícil es que alguien llegue y te diga que nada de lo que ves es la realidad, sentirte diferente y no saber el porque. Hoy en día me pregunto si realmente vale la pena quejarte de esta realidad y decir enfadado: ni modo, esta es la realidad. Cuando hay en este mundo 1% de personas que desean volver a sentirse parte de este mundo. La irrealidad es para unos algo bello, pero para otros representa un infierno que ellos no decidieron y que no entienden, pero sin embargo tienen que lidiar con ella días, tras noche viviendo de pastillas que ni siquiera saben para que son. Tu, que tienes el privilegio de gozar de la hermosa realidad, disfrútala, te juro que no querrás conocer la verdadera realidad de la irrealidad, no querrás estar en sus zapatos.
En México, uno de cada 100 habitantes sufre de esquizofrenia y 50% carece de tratamiento, e incluso de un diagnóstico adecuado, por lo que muchos se suicidan o mueren a temprana edad, veinte años antes, en los cuartos traseros de sus casas o bien en las calles.
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