Amiga.

Duele ver como tus amigos te dan la espalda cuando más los has ayudado, duele ver que en los momentos más difíciles cuando necesitas un hombro en donde llorar nadie este a tu lado. Cuando te enteras de que ahora no eres la caja de sus secretos, y que desconfía de ti. Duele haberle defendido de todo el mundo y que ellos no sepan apreciar todo lo que has hecho. Pero mi intención nunca fue que tú te dieras cuenta de todo lo que he hecho por ti, porque no esperaba que me lo agradecieras y ahora mismo tampoco lo espero, solo quería que mis consejos te facilitaran la vida, solo quería regalarte mis ojos para que vieras con más claridad que estas mal, para que no calleras otra vez en el mismo holló, para que no te doliera tanto. Quería solo ayudarte, porque se supone que éramos amigas, se supone que éramos como hermanas, y en donde quedo la palabra mejor, en donde estas tu cuando necesito un abrazo? Esperaba una carta y está todavía no llega porque sé que era mentira. No sé si te moleste mi forma tan dura de decirte que estas mal, no sé si este harta de escuchar que alguien te de consejos, pero tengo miedo de que te caigas y no aprendas de tu error. Amiga, a pesar de que yo ya no represente para ti lo que tú para mi, quiero que sepas que estoy aquí para todo, quizás haga mal de seguir a tu lado, pero quiero estar contigo por si alguna vez te das cuenta que todo lo que siempre quise es que fueras feliz, es que abrieras los ojos a una realidad que si bien es dura es lo que nos toco vivir y lamentarnos no sirve de nada. Quizás en el momento en el que te lo dije no supe explicarme, y mi dureza te hiso confundir. Pero quiero que sigas confiando en mi, quiero que escuches lo que te digo aunque no te importe yo se que al menos de mil palabras que te dije tres van a quedar en tu mente y con eso me basta para que algún día sepas de que hablaba, no quiero que me lo agradezcas, mi agradecimiento va ser verte madurar, va ser verte feliz, va ser verte levantarte de los golpes tan duros que a veces da la vida. Tampoco espero después de esto un abrazo, quiero un abrazo cuando te des cuenta de que estoy aquí, y estaré para ti aunque me des la espalada, aunque me ignores, porque yo todavía se el significado de una mejor amiga, de una hermana y eso eres tú para mi, una hermana a la que voy a ayudar, a la que le voy a ofrecer mi hombro cuando se sienta mal, con la que voy a reír y voy a llorar. Si en los momentos en los que me necesitabas no estuve conmigo, quiero pedirte perdón, sé que no demostré mi amistad en esos momentos, pero te conocía tan bien que sabía que eras tan fuerte como para levantarte, recuerda que mi ayuda siempre la has tenido y la tendrás. Estoy aquí amiga, quiero que seas feliz y si para eso me tengo que ganar tu enemistad lo haré, pero al menos te veré sonreír, si ahora mismo prefieres no contarme nada no te preocupes lo entenderé, si prefieres no decirme nunca lo que planeas está bien, no importa, acuérdate que cuando te caigas siempre tendrás mi mano para levantarte. Solo te pido que cuando cometas un error me lo digas, te ayudare a que sea más fácil encontrar una solución. Te quiero, supongo que hacía falta que te lo dijera, creo que lo habías olvidado, pues ahora te recuerdo que siempre lo he hecho.